sábado, 29 de mayo de 2010

MARUJA MALLO,MITAD MUJER MITAD MARISCO.









Cabeza de mujer de frente (1941)

El rostro expresivo de una mujer con sus intensos ojos azules, tez clara y sonrosadas mejillas, el pelo bien moldeado, un peinado riguroso, simétrico, que la autora pinta con precisión matemática. Las curvas del pelo son volutas y hay otras formas geométricas en el retrato que toma de la naturaleza.



En una etapa anterior la artista Maruja Mallo defendía la figuración geométrica. En esta de retratos femeninos pinta mujeres fuertes, deportistas, retratos bidimensionales con cuerpos contundentes o idénticos, produciendo figuras fuertes y seguras, otras veces mujeres solas, de frente o de perfil.


La Maruja Mallo que mejor conocemos es la surrealista. Pero estas series menos conocidas nos presentan una pintora mucho más preocupada por la precisión matemática y alejada del surrealismo.



¿Podía una mujer tan libre, en la que Breton era el marido universal, ser abstraccionista y practicar una dudosa figuración? pregunta Estrella de Diego.



En Mallo hay un deseo de orden clasificatorio, de archivo, de hacer series poco surrealistas, de ser una disidente, como Max Ernst.

Las cinco razas están representadas en estos Retratos, hay un deseo de orden.Pinta parejas de bustos femeninos, de frente o de perfil, que representan arquetipos raciales del futuro. El igualitarismo de las razas humanas lo explora Mallo como una etnógrafa, como hizo también la Kahlo en Méjico.
Cálculo matemático disfrazado de figuración. La matemática viviente del esqueleto.

Demasiado clasicismo por una parte pero también, como escribió Gómez de la Serna, recoge tradiciones de retratistas flamencos, de Rembrandt, del Greco o de los italianos, al pintar la figura humana y expresar los valores de la experiencia síquica y el conocimiento cósmico en el retrato.

Gómez de la Serna nos dice de Rembrandt

"una vez acabado el lienzo, nos mira desde el fondo de éste sin gran angustia...
porque el objetivo del artista consiste en ofrecer íntegramente la idea, y no alcanzar la gloria, y sentirse tranquilo.. una vez terminado el cuadro, en tanto en cuanto le parece fiel a lo que tenía que representar en él."

ARTE CONCEPTUAL RUSO


Autorretrato doble de Komar & Melamid: En vez de las caras barbudas de Marx y Lenin que adornaban fábricas y colegios, los artistas pintan sus propios bustos con la leyenda de Sots-Art que sustituye a "Gloria al Partido" u otras similares de propaganda política. ¿Hasta dónde llega su ironía?







En la antigua Unión Soviética existió un círculo de artistas conceptualistas que ironizaron sobre las condiciones de unas vidas y una cultura sometidas a las reglas del pensamiento único por haber sido configuradas como una realidad artística e ideológica total. Trabajaron de forma no oficial, incluso marginal ,y en su mundo se movieron también literatos y pensadores.

Recurrieron al absurdo para ridiculizar la oficialidad, recogiendo la tradición de la literatura del absurdo de los años 20 y el suprematismo de Malevich.

Teorizaron sobre la forma de acercarse a la obra de arte: estudiarla teniendo en cuenta lo que hay detrás de los colores y añadiendo frases en el cuadro o junto a él, comentarios que pertenecen siempre a la obra de arte y a su vez la explican.

Ya Malevich persiguió "la supremacía del sentimiento puro del arte" como esfuerzo de fuga frente al control social, buscando en libertad formas puras, imposibles de hallar en la naturaleza. Su Cuadrado Negro ha sido interpretado como "la muerte de la pintura". Pero Stalin le obligó a volver a la pintura figurativa del realismo social.

Los conceptualistas de Moscú recogieron la ideas de Malevich añadiendo comentarios y textos a las obras de arte. Esto sucede desde 1960, medio siglo después de que se iniciase la utopía rusa y tras la muerte de Stalin, en un momento en que el plan artístico total había fracasado y el PCUS, partido único, imponía el pensamiento único y la era del auténtico comunismo, de forma propagandística.

Los rusos conocían a los artistas occidentales del arte conceptual y del arte pop y entre sus precursores mencionaban a Marcel Duchamp, el que lanzó al arte por el camino del desconcierto.

Realizaron acciones colectivas y se divorciaron de los críticos, crearon archivos, promovieron performances, aunque no existía ningun mercado para este tipo de arte en la Unión Soviética ni podían ganarse la vida pintando. Fueron independientes y tolerados pero estaban al margen de las exposiciones oficiales.
Crearon nuevas formas de relación con una sociedad ideoligizada, convirtiendo los eslóganes en arte y reduciéndolos al absurdo. No fueron sin embargo opositores ni disidentes sino que crearon un mundo paralelo al oficial. Utilizaron más bien la ironía para variar y analizar el discurso oficial, pintando por ejemplo los cigarrillos Malévich o un cuadro de la Lenin-CocaCola, lo que ayudó a deconstruir unos símbolos tanto de la ideología comunista como del consumismo. Algunos se declararon romántico-irónicos y dijeron tener vocación por la magia. El trasfondo literario se plasmó en la inclusión de textos y la creaciòn de personajes, falsos artistas y escritores e incluyendo metáforas.

BAJO REGÍMENES DICTATORIALES, BAJO LOS TOTALITARISMOS, LOS ARTISTAS, PARA PODER HABLAR LIBREMENTE DE LO QUE SUCEDÍA, TUVIERON QUE DISFRAZARSE Y PONERSE MÁSCARAS. UTILIZARON EL HUMOR COMO ARMA ARROJADIZA.

EL ARTE DE LA AMISTAD.







Hay algo muy notable en la libre circulación de ideas y valores compartidos que estuvo en la raíz de la amistad entre Duchamp, Man Ray y Picabia. Los intereses de uno alentaban la exploración y reinterpretación de los otros, dentro de un espíritu de experimentación, provocación y diversión. Manifestaron una visión muy peculiar de la originalidad y la autoría, en la que no cabía la competitividad y que reflejaba profundas convicciones sobre la naturaleza de la libertad artística.



Los tres artistas sintieron la necesidad de retirarse de alguna manera de la sociedad para conservar su libertad personal y moral. Man Ray escribe: "No hagas nada, no seas nadie, pero sobre todo no seas útil a la sociedad en su conjunto. No te expliques ni te justifiques." Es conocida la rebeldía de Picabia ante las convenciones y Duchamp pasó largos períodos lejos de la atención del mundo artístico, llevando una vida discreta.



La libertad es valorada por los tres artistas, tenían instinto de pioneros y trabajaban a veces sin esperar ningún beneficio material, evitando repetir sus obras y cambiando de estilo. También compartían la idea de que el arte es una expresión de la mente y que no hay que juzgarlo desde la destreza o el "buen gusto" aceptado socialmente. Actitudes irreverentes, anarquistas, estar abiertos a todo, mirar con ojos nuevos, ser libres de influencias.



Marcel Duchamp declaraba en una entrevista que no creía ni siquiera en las posturas. La misma palabra "creencia" es un error. Y también la palabra "juicio" o "creer en tí mismo".



Un profundo escepticismo ante las reglas que gobiernan nuestras vidas y la expresión de ls pensamientos llevó a Duchamp, Ray y Picabia a desmontar y socavar una visión convencional de la naturaleza y el papel del arte. Crearon objetos artísticos que siguen siendo profundamente intrigantes y divertidos por su provocación e irreverencia.



Defendieron la ANARQUÍA ESTÉTICA que aprendieron leyendo a Stirner. Ya en 1844 este filósofo alemán hizo hincapié en la supremacía del individuo, defendiendo el egoísmo por encima de los derechos sociales y lanzando un ataque contra la autoridad social y política. El Estado es el máximo enemigo del individuo y una acción de rebelión protagonizada por individuos con ideas similares iría encaminada a eliminar al Estado. Renunciar a los ismos, a los dogmas, a las ideologías, a todos los sistemas de creencias que sirven para controlar al ser humano. De este filósofo alemán surgen más tarde existencialismo y nihilismo, en su forma más extrema son la base filosófica del anarquismo.



Los tres artistas internalizaron el mensaje de Stirner: el derecho supremo del individuo a ejercer sus cualidades únicas por encima de cualquier otra consideración en el momento de crear sus obras.

MAX ERNST: UNA SEMANA DE BONDAD


Tercer cuaderno: Rojo. Martes. Elemento: el fuego. Ejemplo: La corte del dragón.

Un hombre espía por la puerta entreabierta y observa. La dama envuelta en un rico vestido adornado con lazos, con cintura ceñida y belleza artificial, arrastra el pesado vestido ( simbolizando el peso de la burguesía entregada al favor de los poderosos). Alas de ángel, cola de dragón, reclinados ambos sobre un sofá, en posición de oración.

Espacio cerrado, acolchado. Barroquismo exacerbado ante el horror vacui. Abundantes cortinas, alfombras, estampados, telas. Tramas y dibujos por doquier, no hay lugar para el vacío, para el descanso. De allí el recogimiento desesperado de la dama.


Hay un cuadro dentro de un cuadro, un correlato entre el cuadro de la pared, dónde un caballero besa la mano de otra dama con violencia contenida, al agarrar esa mano y besarla con desesperación, y la actitud de la mujer alada.

En teoría se trata de un entorno tranquilo pero no es sino una muerte dulce, que asfixia. Porque no hay ventanas en el hogar, no hay nada blanco, se trata de una noria enloquecida, donde la dama busca la paz en la oración pero ya no hay un dios que escuche las plegarias.

El amor es su soga y el hogar es una jaula hecha a medida. Una vez satisfechos los deseos materiales y encontrado el paraíso, la mujer desespera. Ha habido demasiada renuncia, ha entregado lo que nunca debió entregar, a cambio de una posición social y material.

El hombre mira con atención a la mujer, es aquel hombre surrealista que se sentía a la vez atraído y repelido por el escenario burgués. Al mirar con detenimiento la escena una y otra vez surgen nuevas imágenes y significados, muy cercanos al sueño, a la pesadilla. La burguesía es el infierno acomodado que denuncian las vanguardias.

Un gran dragón se introduce en los hogares, aparecen alas, reptiles, criaturas monstruosas, seres híbridos que se inmiscuyen en la vida de otros personajes alados, mitad ángeles, mitad murciélagos. El ámbito doméstico ilustra la tragedia, los miedos y pesadillas de sus protagonistas.

Grabados que utilizan clichés, estereotipos de representación decimonónica y lugares comunes. Max Ernst los utiliza para componer su imaginario vanguardista. Reutiliza los principios y los tópicos del XIX desde el surrealismo para socavar lo establecido, para producir un extrañamiento, al incumplir las reglas de un relato tradicional. Con ello busca desestabilizar la sociedad.